Abandonan la secundaria por ‘bullying’ y discriminación

Walter López González indicó que, de acuerdo con las estadísticas del Inegi, 64 por ciento de la población LGBT reportó discriminación en su escuela

Cada vez más estudiantes que cursan el nivel secundario en la entidad y se reconocen parte de la comunidad LGTB optan por abandonar sus estudios a consecuencia de la discriminación o ‘bullying’ que viven en el aula de clases, aseveró el vocero del Frente Queretano por el Derecho a la No Discriminación y a Favor del Estado Laico, Walter López González.

“Antes el ‘bullying’ era para la gente grande, arriba de 18 años, pero ahora no, como se están destapando y saliendo del clóset cada vez más niños y niñas; el gran tema que los papás nos dicen es: ‘Ayúdame, está en la secundaria’, y ahí es donde la mayoría de las personas trans, no convencionales, deciden dejar la secundaria con todo el problema que acarrea que no sigan educando”, subrayó.

Tras exponer que “el ‘bullying’ está escalando”, recordó que la secundaria es el nivel educativo en el que los menores de 13 a 15 años muchas veces reconocen su identidad sexual. Señaló que hace cuatro años en el estado se presentó un caso en que padres de familia de menores LGBT y docentes optaron por abrir un grupo de estudio en casa, pues los adolescentes eran víctimas de discriminación en su escuela regular.

“Como producto de que USEBEQ (Unidad de Servicios para la Educación Básica en el Estado de Querétaro) no tenía una respuesta y preocupados porque sus hijos no dejaran la secundaria, los padres dijeron: ‘Demos la educación nosotros’, porque varios, incluso, algunos eran papás maestros”, detalló.

Explicó que los menores obtuvieron su certificación de nivel secundaria y, de manera posterior, ingresaron a la preparatoria de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), donde aseguró que se aplican protocolos incluyentes.

“La última estadística que hizo Inegi te habla de que 64 por ciento de la población LGBT reportó discriminación en su escuela. Nosotros sabemos que los espacios públicos tendrían que ser espacios de cuidado (…) y no son así, en un porcentaje amplio los niños, niñas o niñes LGBT se sienten discriminados”, dijo.