Especialistas coincidieron en que la militarización del país tiene como consecuencia el aumento de la violencia
Con la militarización y el debilitamiento de las instituciones de seguridad pública en México, el país podría tardar hasta 48 años en alcanzar los índices europeos de procuración y administración de justicia, aseveró Lisa María Sánchez, directora de México Unido Contra la Delincuencia (MUCD), esto durante su participación en la vigésima México Cumbre de Negocios que se realiza en Querétaro.
“El despliegue de fuerzas militares no ha servido para reducir la violencia, en todo caso la ha exacerbado; tampoco ha ayudado a reducir los niveles de impunidad”.
Mencionó que este debilitamiento de las instituciones de seguridad pública se ha dado en el país del 2006 a 2021, pues durante este periodo se ha registrado el mayor despliegue y las mayores reformas legales en materia de prevención.
Recalcó que durante ese mismo periodo ha habido un incremento presupuestal del 163 por ciento a las instituciones militares en el país; mientras que en ese mismo periodo, el presupuesto a las instituciones de seguridad pública ha sido del 18 por ciento.
Mencionó que las consecuencias de utilizar las fuerzas armadas para tareas de seguridad pública es el aumento de los enfrentamientos, así como un incremento en el cargamento militar de los grupos de delincuencia; y, por ende, una alza en la violencia letal.
“Y un aumento en los homicidios, ¿de hasta cuánto? de hasta cuatro veces más; y en los peores momentos de despliegue y violencia criminal la tasa de homicidios incrementó de ocho homicidios por cada 100 mil habitantes a más de 24 homicidios por cada cien mil habitantes”.
Por su parte, Edna Jaime Treviño, directora de México Evalúa, consideró que el crimen empezó a rebasar las capacidades de las instituciones en el país; además de que se registró un recorte al presupuesto de los policías estatales y municipales.
“Necesitamos un cuerpo de seguridad federal, porque ahorita hay una construcción errática de la Guardia Nacional; estamos desnaturalizando las tareas de las fuerzas armadas, que antes eran justo el último recurso y ahora los tenemos en todos lados”.