De acuerdo con la CEA, la mayoría de las fugas en tomas domiciliarias fueron detectadas en las colonias Lomas de Casa Blanca, Reforma Agraria, Milenio III, Lomas de San Pedrito y Carrillo
Se mantiene en pie el plan de instalar sensores para detectar fugas de agua potable en la red de distribución, confirmó el vocal ejecutivo de la Comisión Estatal de Aguas (CEA), Luis Alberto Vega Ricoy.
El funcionario estatal explicó que el organismo regulador continúa las pláticas con el fabricante de los sensores y recordó que para concretar la instalación de los mismos se tendrá que llevar a cabo un proceso de licitación. Vega Ricoy puntualizó que para no generar gastos millonarios, los sensores se mudarán de una red a otra, una vez que se concluyan las reparaciones por zona.
“Vamos a contratar, estamos todavía en pláticas con el fabricante para poder hacer la licitación. Son sensores se van a ir poniendo en sectores y, una vez que arreglemos un sector por completo mudamos eso a otro sector (…) para no gastar sino sería millones y millones. Vamos mudando y arreglando por sectores”, dijo.
De acuerdo con información que proporcionó la CEA, en 2022 se reportaron al organismo operador del agua un total de 20 mil 220 fugas en la zona metropolitana de la ciudad de Querétaro.
De ellas, 88 por ciento fueron en tomas domiciliarias y 12 por ciento en la red de agua potable. Las colonias con mayor incidencia de fugas en tomas domiciliarias del vital líquido fueron Lomas de Casa Blanca, Reforma Agraria, Milenio III, Lomas de San Pedrito y Carrillo Puerto.
Mientras que las fugas en la red se presentaron en su mayoría en las colonias Insurgentes, San Pedrito Peñuelas, La Cañada, Centro Sur y Centro Histórico.
En su momento, el vocal ejecutivo de la CEA señaló que, además de regular la presión para que se genere un ahorro del vital líquido, también atacarían el tema de fugas con la finalidad de perder menos agua en la red y recuperar el volumen en favor de los consumo de la población.
“También (…) vamos a posiblemente, dependiendo de las necesidades, a regular ciertas presiones para poder ahorrar otros 50 litros por segundo más y estamos atacando mucho más el tema de fugas (…)”, apuntó.