Teresa García Gasca manifestó que el futuro secretario le dará prioridad al trabajo político en la resolución de problemas políticos en el sector de la educación en México
Luego de que la virtual presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, diera a conocer el nombramiento de Mario Delgado, dirigente nacional del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), como el próximo secretario de Educación, la exrectora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), Teresa García Gasca, manifestó que el futuro secretario deberá rodearse de un buen equipo de trabajo técnico para poder sacar adelante el tema de educación en el país.
“Yo creo que se le va a dar prioridad al trabajo político en la resolución de problemas políticos en el sector de la educación en México; que no son menos, no es un tema menor, pero no debe dejarse de lado el trabajo técnico respecto de incrementar el nivel educativo. México tiene, hoy por hoy, como muchos países, pero, particularmente nuestro país, un gran problema de rezago educativo ya preexistente a la pandemia, pero recrudecido con la pandemia. Perdimos casi dos años de nivel educativo de estudios a nivel nacional, entonces, sí tiene que haber un buen equipo técnico que apuntale el problema que tenemos en el desempeño educativo”, precisó.
García Gasca consideró que el perfil de Mario Delgado es mayoritariamente político, por lo que se entiende que la administración federal buscará solucionar problemas añejos de gobiernos federales pasadas con los sindicatos, sin embargo, reiteró que su paso por dicha secretaría quizá podría ser no del todo malo, siempre y cuando el morenista se haga acompañar del equipo adecuado.
Por su parte, Edgar Pérez González, director de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), opinó respecto a esta designación que hay que darle el voto de confianza como a todos los nombramientos que la próxima presidenta ha hecho.
No obstante, reconoció que la designación ha generado nerviosismo entre la población, ante una supuesta falta de experiencia referente a lo que la educación en México requiere.
“Esto, por lo pronto, no genera esa seguridad, confianza o tranquilidad que debemos tener todos, pero ya veremos cómo se van dando las cosas”, culminó.
