Si el AIQ consigue su certificación como puerto espacial por parte de la FAA de Estados Unidos, la terminal aérea podría recibir inversiones superiores a los 5 mil millones de dólares
Tras aprobar el primer filtro para que el Aeropuerto Internacional de Querétaro (AIQ) pueda ser certificado como puerto espacial, Marco Antonio del Prete Tercero, titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu), explicó que el proceso completo de certificación podría tardar en promedio seis meses.
Mencionó que en los análisis preliminares se estableció que sí se cuenta con la capacidad para ser un puerto espacial; asimismo, destacó que además el AIQ puede ser un puerto espacial de ciclo completo, es decir, no sólo van a poder despegar las aeronaves sino que van a poder aterrizar, lo que precisó no en todos los puertos espaciales puede darse.
“Ahorita el siguiente paso es la certificación ante la Administración Federal de Aviación (FAA), es un proceso que tomará aproximadamente unos seis meses; ya estamos trabajando con un despacho consultor en Estados Unidos y estaremos dándoles avances conforme vaya la certificación (…) ¿Qué es lo que buscamos? Evidentemente que puedan despegar y aterrizar naves espaciales, obviamente ese sería y vamos a decirlo así y no me malinterpreten sería el segundo paso, el primer paso es atraer a la industria”, precisó.
Inversiones a futuro
Puso como ejemplo que uno de los aeropuertos de Houston, Texas, en Estados Unidos, está certificado como puerto espacial; y aunque ahí aún no despega ninguna nave, ya tienen proyectos de inversión superiores a los 5 mil millones de dólares, lo que se busca pueda llegar al AIQ.
“Que a través de esta certificación atraigamos empresas que les interese desarrollar naves, hemos estado ya platicando con algunas que les interesa desarrollar no sólo naves, sino implementos, manufactura para la industria aeroespacial”, aseveró.
Del Prete Tercero detalló que la capacidad de la pista que supera los cuatro kilómetros, la geografía y el clima del estado de Querétaro, la ubicación del AIQ y que no se encuentra tan cerca de tantos puntos urbanos y centros poblacionales, son algunos de los factores examinados para aprobar la primera fase.
