La diputada de Morena, María Eugenia Margarito Vázquez, mencionó que los espacios públicos deben estar abiertos al pueblo; esto, luego de que el Congreso local abriera sus puertas a los artesanos indígenas
Impulsada por la Comisión de Asuntos Indígenas, en el Congreso del estado de Querétaro se llevó a cabo la Primera Feria Artesanal y Cultural Navideña de los Pueblos Originarios, para que los artesanos pudieran vender sus productos luego de que el gobierno municipal de Felipe Fernando Macías Olvera prohibió la venta de ambulantaje en el Centro Histórico desde finales de octubre.
En el acto inaugural, la presidenta de la Comisión de Asuntos Indígenas, la diputada de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), María Eugenia Margarito Vázquez, señaló que los espacios públicos deben estar abiertos al pueblo.
“Por supuesto, estos espacios siempre deben estar a la disposición de nuestros artesanos, lo contrario de llevarlos a espacios cerrados en donde nadie los ve. Cómo van a poder vender sus artesanías, que son sus sustentos de todos los días, que son lo que hacen para mantener a la familia, son de lo que viven a diario”, resaltó.
Respecto al acuerdo que llegó el presidente municipal de Querétaro con artesanos de abrir espacios para el comercio, además del Mercado Artesanal, la legisladora señaló que aún no hay acciones concretas, y, afirmó, que son muchos artesanos que no tienen espacios para la venta, por lo que se deben impulsar eventos para la comercialización.
Elia Espino, integrante del colectivo Tradiciones Queretanas, detalló que al menos 50 familias de artesanos indígenas no tienen un espacio en el Mercado Artesanal.
Como el caso de Reyna, artesana indígena originaria de Santiago Mexquititlán, quien señaló que no tiene lugar para vender en el Mercado Artesanal, por lo que ha recurrido a vender en canastas en las calles. “No nos dejan trabajar agusto en la vía pública, pero estamos luchando en otros lugares”, afirmó.
En tanto, Verónica, artesana indígena de Santiago Mexquititlán, aseguró que las ventas en el mercado son muy bajas, porque no transitan turistas, en comparación a cuando vendían en las calles del Centro Histórico. “Exigimos que por lo menos nos dejen caminar en el centro para vender”, pidió.