Este fin de año, la uva rebasa los 220 pesos por kilo en los principales mercados de la ciudad de Querétaro, mientras que en tiendas de autoservicio se vende en aproximadamente 140 pesos
A unos días de los festejos de Año Nuevo, el kilogramo de uva ha rebasado los 220 pesos en los principales mercados de la ciudad de Querétaro, mientras que en tiendas de autoservicio se vende en aproximadamente 140 pesos el kilo.
En el mercado Escobedo, el kilo de uva roja cuesta en promedio 112 pesos y el de uva verde, desde 220 hasta 240 pesos por kilo.
“Es por la temporada (…) las uvas son de los productos más buscados ahorita. La roja siempre es más económica que la blanca, pero esta época la gente pide más la que no tiene semillas y esa es más cara por lo mismo”, comentó Isabel Cruz García, locataria desde hace 30 años.
Agregó que la demanda de esta fruta aumentará aún en los siguientes días y no descartó que pueda encarecerse todavía más conforme se acerque el 31 de diciembre.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la uva es el segundo producto que más subió de precio durante el último año en el segmento de frutas y verduras (36.07 por ciento), solo por debajo de la sandía (37.43 por ciento).
Con el paso de los años, esta fruta se ha convertido en un elemento primordial en la cena de Nochevieja, ya que las personas tienen la costumbre de comer 12 uvas por cada una de las campanadas que preceden al inicio del Año Nuevo.
Después del Día de los Santos Inocentes, las personas han regresado a los mercados en busca de los ingredientes para la cena de fin de año. Atrás han quedado los tamales, el pavo y el bacalao de Navidad, por lo que ahora la carne para asar, el cabrito y hasta el conejo son opciones para recibir 2025.
“Venimos a buscar alternativas. Muchas familias prefieren hacer una carne asada o un pozole para el Año Nuevo. Otras van a restaurantes o eventos en hoteles (…) porque ya es una celebración más de amigos, es más de fiesta que la Navidad, que es más de familia”, dijo Andrés Jiménez Ramos, cliente habitual del mercado Escobedo.