El secretario de Gobierno estatal, Carlos Alcaraz, aseguró que en Querétaro hay coordinación ante un posible cambio en la política migratoria por parte de la nueva administración de EUA, encabezada por Donald Trump
Ante la toma de protesta de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, el secretario de Gobierno del estado, Carlos Alcaraz Gutiérrez, aseveró que la entidad ya se mantiene en coordinación con el Instituto Nacional de Migración (INM), los gobiernos municipales, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ), como parte de una preparación ante un cambio en la política migratoria por parte de la nueva administración del país vecino.
Esto, ante una posible deportación masiva de migrantes, por lo que el funcionario puntualizó que las medidas que se tomen formarán parte de una política nacional y del Estado Mexicano; reiteró que los escenarios inmediatos se desarrollarán en la franja fronteriza más que en estados como Querétaro.
“Se ha estado trabajando con (…) el Instituto Nacional de Migración, así como con los distintos municipios para estar preparados, entendiendo que pudiera haber algún cambio en Estados Unidos en su política migratoria y estamos atentos. Una vez que el gobierno norteamericano defina algún tipo de política en ese sentido, tendremos que ver como el Estado Mexicano responde, cuales serán las instrucciones de coordinación que tendremos que tomar todas las entidades”, apuntó.
Asimismo, refirió que todavía no concluyen las obras de remodelación de la estación del INM que se encuentra en la colonia Ejido Modelo del municipio de Querétaro.
Durante su toma de protesta en Washington, Donald Trump aseveró que, de manera inmediata, llevará a cabo acciones para empezar “la restauración de Estados Unidos”. Entre ellas, confirmó, se encuentra declarar una situación de emergencia nacional en la frontera sur con el envío de tropas, la detención de las entradas legales al país para “empezar un proceso de devolver millones y millones de delincuentes a los países de donde vinieron”, así como la “reinstalación de la política de permanecer en México”.
