Independizarse y adquirir una casa o departamento propio es un gran paso en la generación de patrimonio, y encontrar el mejor crédito y ahorrar lo suficiente es fundamental para cuidar las finanzas a largo plazo
El gran paso que tenemos que dar para meternos de lleno en la vida adulta es el de independizarnos, buscar una vivienda propia y empezar a vivir por nuestra cuenta. Ante ello, la mayoría opta por rentar un departamento o vivir con ‘roomies’, pero lo óptimo es hacer un plan para tener vivienda propia.
Existe la creencia de que adquirir un departamento o casa si no tienes patrimonio es, actualmente, imposible y, aunque no es tan fácil o barato como lo fue en el siglo 20, hay opciones para poder adquirir una vivienda a los “veintimuchos” o “treinta y pocos”.
En México, el salario promedio para gente entre 28 y 39 años es de 36 mil 288 pesos, según el Inegi; sin embargo, es posible conseguir un crédito con salarios menores, solamente debes adoptar el hábito de ahorrar lo más posible mientras vivas con tu familia, tener capacidad de organización y no tener miedo a endeudarte.
Antes de solicitar un crédito
Fernando Soto-Hay, director de Tú hipoteca fácil, empresa dedicada a la asesoría de créditos hipotecarios, relató que, en México, los jóvenes se independizan a una edad promedio entre 28 y 29 años, la mayoría, pagando rentas.
“No debe haber prisa para salir de casa de tus padres. Desde que a tus 22 o 23 años empiezas a trabajar, ahorra; luego de seis o más años, tendrás una cifra importante para el enganche”, destacó Soto-Hay.
Además de tu sueldo, puedes fortalecer tus ingresos mediante otras actividades, como dar clases particulares, tener un negocio o realizar cualquier actividad que te genere un ingreso extra, el cual podrás sumar a tu sueldo cuando el banco te pida comprobar ingresos.
Es importante que cuides tu historial crediticio, pues jugará un papel fundamental en la decisión de la institución financiera de otorgarte un crédito. La antigüedad en tu trabajo y la estabilidad en tus ingresos será otro de los factores que facilitarán la obtención de tu hipoteca.
Una vez que tu ahorro inicial sea importante, es momento de empezar a buscar inmuebles en venta.
Acceder a un crédito hipotecario
Ya que sepas qué propiedad quieres adquirir, tengas la posibilidad de pagar un enganche y la manera de comprobar ingresos e historial crediticio sólido, es momento de comparar las opciones existentes en el mercado para adquirir una hipoteca; puede ser por tu cuenta, pero es recomendable tener algún tipo de asesoría para tomar la decisión correcta.
“La hipoteca ideal para una primera vivienda es aquella con tasa fija, en pesos y con un plazo de 20 años, aunque lo mejor es que se pueda hacer más corto ese periodo a 15 años”, declaró Soto-Hay.
Muchas veces existe el miedo a endeudarse y más cuando significa comprometer los ingresos personales por medio de mensualidades durante tantos años; sin embargo, un crédito hipotecario genera riqueza, pues tu propiedad subirá de valor y puede ser una vía de ingresos en un futuro.
También considera que, en caso de que en algún momento exista alguna falta de empleo, no te atrasarás en los pagos, ya que este tipo de productos financieros cuenta con un seguro de desempleo que cubre entre tres y seis mensualidades del crédito.