La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció que -a partir del 1 de junio- la minería, la construcción, la fabricación de equipo de transporte y la producción de cerveza serán actividades esenciales
Al presentar el Plan gradual hacia la nueva normalidad en la Ciudad de México, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, señaló que la situación crítica por contagio de coronavirus permanecerá al menos hasta el 15 de junio. Anunció que las actividades educativas se retomarían hasta agosto.
“Algo importante que quisiera resaltar es que hasta el 15 de junio estamos estimando que sigue el semáforo rojo y las actividades educativas no inician en junio. Y estamos esperando, de acuerdo al comportamiento de la hospitalización, que probablemente inicien hasta agosto”, dijo.
El plan detalla la reapertura paulatina de la capital del país a través de los colores del semáforo que se estará alimentando constantemente. Actualmente la Ciudad de México permanece en color rojo debido al alto riesgo de contagio y el incremento de personas que demandan servicios hospitalarios.
De acuerdo con el plan presentado, el semáforo podría comportarse de la siguiente manera: de junio a julio se extendería el color rojo, o de julio a agosto el naranja, o de julio a septiembre el amarillo, o de agosto a septiembre el verde.
Sheinbaum aclaró que la transición al siguiente color del semáforo dependerá de que la población mantenga las medidas sanitarias que hasta ahora se han implementado, además de que el número de personas hospitalizadas se reduzca.
A partir del 1 de junio se permitirá la reapertura de otras actividades esenciales: minería, construcción, fabricación de equipo de transporte y producción de cerveza, que deberán operar con protocolos de salud pública, reglas de operación con flujos, distribución de empleados y clientes, y señalización para cada uno.
A partir de esta fecha también se reabrirán parques, en los que se permitirá el acceso al 30 por ciento de su capacidad para que la población realice actividades al aire libre.
En tanto, las actividades educativas serán retomadas hasta agosto, precisó.
Insistió que las medidas de salud pública deben continuar en todas las etapas del semáforo, con el uso de cubrebocas en transporte público y lugares aglomerados, lavado de manos frecuentemente y uso de gel antibacterial.
También mantener la sana distancia y no saludar de mano y mantenerse alejado; estornudo de etiqueta; y limpieza de hogares y lugares de trabajo.
En el color rojo del semáforo sólo se permite el funcionamiento de las actividades esenciales, retorno de instituciones de justicia y del Legislativo a través de videoconferencias.
También educación a distancia, parques al 30 por ciento de su capacidad de aforo, las personas vulnerables permanecen en aislamiento, y el seguimiento epidemiológico se realiza a través de mensajes SMS, reportes de contagios y monitoreo del semáforo.
En el color naranja los horarios y días de trabajo son escalonados; hay reapertura de restaurantes, hoteles, servicios religiosos al 30 por ciento de su capacidad; mientras que los cines y teatros al 50 por ciento de su aforo.
En tanto, micro y pequeños negocios podrán abrir con menos de 30 empleados; además finaliza el Hoy No Circula temporal e incentivan el uso de bicicleta para traslados.
En el color amarillo restaurantes, hoteles, servicios religiosos, cines, teatros y los parques podrán incrementar su afluencia al 60 por ciento de su capacidad; y se permitirá el retorno escalonado de corporativos y tiendas departamentales al 60 por ciento.
En esta etapa también regresan las personas a las oficinas gubernamentales y las personas vulnerables podrán salir sólo lo necesario.
En el color verde, al que se le ha llamado la nueva normalidad, se deben mantener las medidas de distanciamiento e higiene para la contención del virus; se permite la reapertura de bares, gimnasios, centros nocturnos y antros; además el seguimiento epidemiológico se mantiene y monitoreo de indicadores y nuevos brotes.
Sheinbaum Pardo agregó que si en la Ciudad de México no se hubiera implementado la Jornada Nacional de Sana Distancia y medidas de higiene el número de hospitalizados hubiera crecido hasta 60 mil, mientras ahora se prevé que alcance los ocho mil a finales de este mes.
“Estoy convencida que vamos a salir adelante, como siempre ha salido la Ciudad de México y sus habitantes, en estas situaciones difíciles. Más pronto que tarde podremos regresar a nuestras actividades, sin poner en riesgo nuestra salud”, agregó.