La Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) será degradada a nivel de Dirección para reportarle a la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, encabezada por Hugo López-Gatell, quien bajo su tutela tendrá otras 12 instancias que convertirán dicha subsecretaría en una poderosa instancia del sector salud.
Ello como parte de los reacomodos del organigrama de la Secretaría de Salud definidos conforme el anteproyecto de acuerdo firmado por el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, donde se concreta la desaparición de la Subsecretaría de Integración y Desarrollo del Sector Salud -que era encabezada por Asa Cristina Laurell- y donde el organismo sanitario que operaba al mismo nivel de una Subsecretaría ahora operará como una de las 13 áreas adscritas a la única subsecretaría que permanecerá, que es la que lleva López-Gatell.
El documento fue remitido ayer la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer) para su trámite, antes de ser publicado para su puesta en vigencia en el Diario Oficial de la Federación.
El pasado 6 de agosto, este medio anticipó sobre este plan, ya que así lo había anunciado en reunión del gabinete de salud el director del Instituto de salud para el Bienestar, Juan Ferrer. En esa ocasión también estaba considerado pasar al Consejo de Salubridad General (CSG) a las filas del Insabi, pero este movimiento no quedó incluido dentro del reacomodo publicado en el acuerdo.
El regulador mexicano en materia sanitaria, creado 05 de julio del 2001 por decreto del entonces presidente Vicente Fox Quesada, había adquirido en años anteriores una posición estratégica no sólo en materia de vigilancia y supervisión de una enorme gama de productos y servicios relacionados con la salud de la población, sino por un rol de suma importancia por los permisos y derechos que otorga a sectores productivos económicamente relevantes para el país.
Las industrias que regula Cofepris producen todo aquello que ingerimos, tomamos, nos untamos, nos aplicamos, inhalamos; es decir, todo lo que entra de una u otra manera a nuestro organismo. Esta industria tiene su propio peso dentro de la producción económica del país. En años anteriores se ha estimado que los sectores industriales que regula el organismo sanitario representan 10% del Producto Interno Bruto (PIB) de México.
Adicionalmente, Cofepris había adquirido reconocimiento internacional por la calidad y nivel regulatorio, y fue avalada por la Organización Panamericana de la Salud como una de las pocas agencias de referencia, y asimismo consiguió en el sexenio anterior ser miembro pleno del Esquema de Cooperación de Inspección Farmacéutica (PIC/S), que agrupa a las agencias reguladoras más importantes del mundo.
Conforme el acuerdo publicado en Conamer, las áreas de la extinta Subsecretaría quedarán repartidas en cuatro instancias que conformarán la nueva estructura de la dependencia rectora en salud.
Estas son: la propia Subsecretaría de López Gatell, la Unidad de Administración y Finanzas que dirige Pedro Flores, la Comisión Coordinadora de Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad que lleva Gustavo Reyes Terán y la Unidad de Análisis Económico encabezada por Marcos Cantero, quien es también coordinador de asesores del secretario de Salud.
De estas cuatro instancias, la que queda más fortalecida es la Subsecretaría de Prevención y Promoción con 13 órganos a su cargo: la Cofepris, la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva, el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades, el Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/SIDA, el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia, el Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea, Servicios de Atención Psiquiátrica, la Dirección General de Epidemiología, la Dirección General de Promoción de la Salud, la Dirección General de Información en Salud (ésta estaba en la Subsecretaría de Asa Cristina Laurell) y los secretariados técnico del Consejo Nacional de Salud Mental y del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes.
Este ajuste administrativo se produce en medio de un giro en la política de abasto de medicamentos e insumos de salud para el sector público, luego de que el gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador decidiera encargar a la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) la compra del producto en procesos internacionales.
Ante ello, la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf), que representa a más de 70 plantas de la industria farmacéutica nacional, pidió que, para mantener una competencia pareja con los productos importados, se exigiera a la UNOPS adquirir medicamentos que cuenten con el registro y autorización sanitaria de la Cofepris, tal como se le exige a los productores nacionales.
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