El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que no intervendrá en la posible investigación de la FGR contra Enrique Peña Nieto por presuntos delitos de corrupción
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, descartó que vaya a detener una posible investigación contra su antecesor Enrique Peña Nieto, después de que el periódico Reforma filtró un supuesto documento de la Fiscalía General de la República (FGR) que vincularía al exmandatario mexicano con delitos de corrupción.
Peña Nieto habría ordenado sobornar a legisladores federales para que aprobaran las reformas estructurales, informó ayer el diario Reforma, citando una orden solicitud de orden de arresto contra de quien fuera su secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso. La FGR no comentó la víspera nada sobre la filtración.
“No, no puedo hacerlo (frenar la averiguación), tendría que llevarse a cabo la investigación y los jueces resolver si debe ser juzgado o puede ser juzgado en el marco legal vigente”, afirmó López Obrador en su conferencia de prensa matutina, al ser consultado sobre la posibilidad de que obstaculice las indagaciones.
El mandatario mexicano añadió que independientemente del proceso legal, él es partidario de que se consulte al pueblo en un referéndum en 2021 en el que se preguntará a los ciudadanos si están de acuerdo con que varios expresidentes sean enjuiciados por corrupción, y que él mismo impulsó en septiembre.
Aunque asegura que votaría “No” en el referéndum porque es partidario de una política de “punto final” y de mirar hacia adelante, López Obrador ha remarcado una y otra vez la importancia de que se conozcan las supuestas actividades corruptas de sus predecesores para “purificar la vida pública”.
Su plan recibió un espaldarazo cuando el extitular de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio “L”, procesado por corrupción, señaló a Videgaray Caso y Peña Nieto como parte de una trama por la que se habrían distribuido a políticos millones de dólares en sobornos de la empresa constructora brasileña Odebrecht para aprobar la reforma energética.
