El miércoles, una jueza de Nueva York aceptó el inusual pedido del gobierno estadounidense de desestimar los cargos contra Cienfuegos, quien fue liberado y llegó horas después a México
El canciller de México Marcelo Ebrard dijo este jueves que sería muy costoso para su país no investigar al exministro de Defensa Salvador Cienfuegos, tras haber logrado que Estados Unidos desestime graves cargos de narcotráfico en su contra y deje el caso en manos de la justicia local.
“Diría que sería casi suicida, para eso mejor no decimos nada, que se quede allá”, dijo Ebrard durante la conferencia matinal del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El miércoles, una jueza de Nueva York aceptó el inusual pedido del gobierno estadounidense de desestimar los cargos contra Cienfuegos, quien fue liberado y llegó horas después a México. El militar había sido arrestado el pasado 15 de octubre en Los Ángeles.
Apenas arribó, la Fiscalía General de la República (FGR) informó a Cienfuegos que es investigado y le pidió su información personal y de contacto. El general expresó su “total disposición” para atender los requerimientos de la pesquisa, informó la FGR.
Ebrard aseguró que en México “no existe el escenario de impunidad” y que para eso se pidió la evidencia reunida por la justicia estadounidense.
López Obrador, por su parte, insistió en que no se puede aceptar que se fabriquen delitos ni acusar a nadie por “política, consigna o venganza”. Rechazó asimismo dar por ciertas acusaciones solo porque las formulan otros países.
“No porque se trata de agencias o instancias judiciales de otros países ellos son los poseedores de la rectitud y de la justicia”, dijo el mandatario, quien reconoció, no obstante, que la situación se generó por el mal desempeño de autoridades mexicanas en el pasado.
Analistas consultados por la AFP dudan que Cienfuegos, un poderoso general en retiro de 72 años, pueda ser investigado y procesado de manera imparcial en México.
El país ocupa el puesto 60 de 69 de un índice de impunidad global elaborado por la privada Universidad de las Américas, que mide variables como la corrupción de autoridades, cantidad de personas en espera de sentencia y número de jueces por cada 100,000 habitantes.
El mandatario rechazó también versiones periodísticas de que su gobierno habría amenazado a Washington con retirar del país a efectivos de la agencia antinarcóticos DEA si no le entregaban a Cienfuegos.
“No amenazamos a nadie, lo único que hicimos fue, por la vía diplomática, expresar nuestra inconformidad y nos entendieron muy bien”, agregó López Obrador.
El gobierno del izquierdista ha subrayado que su reclamo a Estados Unidos responde a un asunto de confianza y principios de la cooperación bilateral, los cuales no fueron respetados con la detención del militar al no haber sido informadas previamente las autoridades mexicanas.