El presidente reconoció que a pesar de los incrementos históricos que se han registrado en los últimos dos años, el salario mínimo en México se mantiene como uno de los más bajos de Latinoamérica
“Es realmente una vergüenza”, fueron las palabras con las que el presidente Andrés Manuel López Obrador calificó el salario mínimo en México. El mandatario reconoció que, a pesar de los incrementos históricos, este referente en nuestro país se mantiene como el más bajo de América Latina (AL).
“Acabo de ver unas gráficas sobre el salario mínimo en México con relación a otros países y es realmente una vergüenza. En América Latina es el salario más bajo, el salario mínimo de México, aún con los dos años que llevamos de aumentos, que han sido históricos, aumentos del 30% en términos reales, pero aún con eso estamos hasta abajo con relación a otros países”, expuso durante su conferencia matutina.
En ese tenor, López Obrador subrayó que la recuperación del poder adquisitivo del salario mínimo debe continuar en los próximos años, y para ello hay consenso con el sector privado.
La recuperación del salario mínimo es uno de los ejes de la política laboral del actual gobierno federal. En dos años, este referente ha tenido incrementos históricos. Para el 2019 la remuneración básica tuvo un aumento de 16%; para 2020, de 20 por ciento.
Actualmente, su valor diario es de 123.22 pesos a nivel general y de 185.56 pesos en la Zona Libre de la Frontera Norte.
“Hoy nos encontramos en el lugar 16 de 18 países en América Latina”, puntualizó el presidente. Por ello, acotó, es necesario continuar con los aumentos, pues se deterioró demasiado en los últimos años.
Cuatro décadas de deterioro
Las declaraciones del presidente fueron respaldadas por un análisis de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami). En 10 años (1980-1990) nuestro país pasó del lugar 12 a la posición número 30 a nivel mundial en su equivalencia a dólares.
Una política de incrementos por debajo de la inflación fue uno de los motivos que ocasionaron que México saliera del ranking de los 30 salarios mínimos más fuertes del mundo en el año 2000. Mientras naciones como Bahamas, Malta, Taiwán, Belice o Turquía continuaron con su fortalecimiento, según el análisis.
Actualmente, Australia posee el salario mínimo más alto convertido a dólares, seguido de Nueva Zelanda, Luxemburgo, Japón, Irlanda, Países Bajos, Corea del Sur, Bélgica y Reino Unido; rompiendo el mito de que los salarios mínimos más fuertes corresponden a países de bajo desarrollo.
En América Latina, el reporte de la Conasami ubica a México en la posición 16 de 18 naciones, sólo superando el salario mínimo de Cuba y Venezuela, y después de haber estado en los primeros lugares de la región en los años 80, década a partir de la cual se ha observado la tendencia constante a la baja en este referente.
Por ahora, el Consejo de Representantes de la Comisión Nacional de Salarios Mínimo se encuentra en sesión permanente para fijar el monto de este referente para el 2021. Tanto el sector patronal como el sindical han puesto sobre la mesa las propuestas para el siguiente año. La Coparmex consideró que el mínimo debe quedar entre 128 y 135 pesos diarios; la CROC propuso que sea de 143 pesos.
Con información de El Economista
