El subsecretario de Seguridad federal Ricardo Mejía Berdeja, informó que ante los hechos ocurridos en el partido Querétaro – Atlas, las investigaciones corresponden a la administración queretana del gobernador Mauricio Kuri, además de que se revisará el tema de la venta de alcohol
Luego de los hechos de violencia en el Estadio Corregidora de Querétaro, el subsecretario de Seguridad Pública federal, Ricardo Mejía Berdeja, sostuvo que “este es el primer evento de estas características en ese estadio” porque Querétaro “es un estado con bajos índices delictivos” y que debe haber protocolos para evitar “que al calor de la pasión se generen este tipo de incidentes, y regular muy bien también el consumo de alcohol que luego también exacerba este tipo de comportamientos”.
En la conferencia matutina en Palacio Nacional este lunes, Mejía Berdeja confirmó que no hay ninguna persona muerta tras el enfrentamiento entre barras y afirmó que se encuentran en constante comunicación con el Gobierno de Querétaro, encabezado por Mauricio Kuri González.
El subsecretario Mejía Berdeja señaló “la necesidad” de revisar a detalle los protocolos que corresponden a los directivos de los equipos de futbol, a las autoridades y “sobre todo a la Federación Mexicana de Futbol”.
“Es un evento que, insisto, corresponde a la autoridad estatal y hayamos ofrecido nuestra colaboración; pero también ya nos instruyeron a revisar también con la Federación estos protocolos, para prevenir la posibilidad de que se cometan estos hechos”.
“Y desde luego, otra situación importante es ver también el tema del alcohol que se vende en los estadios, para aminorar riesgos y mitigar cualquier conducta que pueda ser lesiva”, declaró el subsecretario de Seguridad.
“Hemos estado señalando la necesidad de revisar a detalle los protocolos que corresponden tanto a los directivos del equipo de fútbol como a las autoridades, y sobre todo a la Federación Mexicana de Fútbol. Es importante para que se evite este tipo de incidentes”, indicó Mejía.
Este sábado, el partido entre los equipos Querétaro-Atlas, campeón vigente en México, por la novena jornada de Clausura del futbol mexicano, fue suspendido como consecuencia de actos de violencia que terminaron con invasión de la cancha por parte de los aficionados y con 26 lesionados, de los cuales, hasta este momento 20 ya fueron dados de alta y 5 continúan graves.