El Gobierno de México deportó este martes a Estados Unidos al presunto líder del Cartel del Noreste, Juan Gerardo Treviño alias “El Huevo”, tras su arresto este lunes en la ciudad de Nuevo Laredo, estado de Tamaulipas, en la frontera con Texas.
Treviño, un objetivo clave para Washington, era un ciudadano estadounidense sin nacionalidad mexicana y su detención derivó de una operación de inteligencia, expuso en conferencia Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana.
“Se trata de un golpe certero a una de las organizaciones criminales más importantes de la zona noreste en el país, con influencia en por lo menos cinco entidades federativas y con operaciones en Estados Unidos”, informó.
Las autoridades enunciaron que sobre “El Huevo” pesan tres órdenes judiciales, una en el estado de Tamaulipas por extorsión y asociación delictuosa; una en el estado de Coahuila por homicidio doloso, secuestro y terrorismo y una orden de detención con fines de extradición a Estados Unidos por asociación delictiva para distribuir cocaína y lavado dinero.
Ricardo Mejía Berdeja, subsecretario de la Seguridad y Protección Ciudadana, indicó que la deportación ocurrió porque el sujeto violó la ley migratoria al estar en México de forma irregular, pero en Texas afronta órdenes de arresto por cargos como conspiración, posesión de armas de fuego y distribución de cocaína y marihuana.
Tras su detención en Nuevo Laredo, las autoridades lo trasladaron en helicóptero a Ciudad de México y después a Tijuana, donde se deportó a Estados Unidos, cuyas autoridades de la policía Marshall lo arrestaron en ese momento.
Además de dirigir el Cártel del Noreste, una de las organizaciones criminales más poderosas del norte del país y responsable de la violencia en esa región, Treviño es presunto dirigente del grupo de sicarios Tropas del Infierno, quienes serían herederos del cártel de Los Zetas.
También es presunto responsable del trasiego de drogas e inmigrantes indocumentados, apuntó la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Su arresto ocurrió en flagrancia tras un trabajo de inteligencia de varios meses que culminó con un operativo en el que participó una base operativa de 30 elementos en Nuevo Laredo, indicó Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional.
Su detención desató este lunes decenas de enfrentamientos entre los sicarios del Cártel del Noreste y el Ejército de México en Nuevo Laredo, lo que forzó a cerrar temporalmente los puentes internacionales que cruzan al país vecino, así como el consulado de Estados Unidos en la ciudad.
“A pesar de que fueron 22 agresiones a instalaciones militares, 16 agresiones a instalaciones civiles y 13 bloqueos carreteros. A pesar de esa actividad de agresión, no tenemos heridos ni tenemos fallecidos”, afirmó el general.
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