Se trata del segundo tiroteo en un centro escolar más mortífero de la última década, después del ocurrido en 2012 en Connecticut./Foto: Agencia EFE
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, lamentó este miércoles el tiroteo en una primaria en la localidad de Uvalde, en Texas, Estados Unidos, en el que al menos 19 menores de edad perdieron la vida, aunque no identificó víctimas con ciudadanía mexicana.
“Enviar mi condolencia, mi dolor, transmitir mi solidaridad con los familiares de los jóvenes que perdieron la vida ayer, mandarles un abrazo fuerte”, dijo el mandatario durante su conferencia de prensa matutina desde Palacio Nacional.
López Obrador externó su solidaridad con el Gobierno estadounidense por la masacre, que también habría dejado tres adultos muertos.
“Son momento muy tristes, muy difíciles y nosotros lo padecemos aquí”, comentó.
“Nos duele mucho que haya estas desgracias”, añadió.
Cuestionado sobre si había algún mexicano entre las víctimas, el presidente dijo que no se sabe, pero aseguró “que son de origen mexicano, la mayoría, no hay duda, es que toda esa región de Texas pertenecía a México”, zanjó.
Y aseguró que los fallecidos son hijos o nietos de mexicanos.
“Nos duele mucho, lo lamentamos, son desgracias que se lamentan mucho”, reiteró.
El martes, un joven de 18 años irrumpió en un colegio de primaria en la localidad de Uvalde, Texas, donde atacó a tiros a los estudiantes que se encontraban en el lugar.
El Departamento de Seguridad Pública de Texas informó a los medios de que 19 niños y un adulto perdieron la vida en el tiroteo, tras ello, el agresor fue acribillado por la policía.
Mientras que el senador estatal Roland Gutierrez, del Partido Demócrata, ha hablado de tres adultos muertos.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, explicó en una rueda de prensa que el agresor, residente en Uvalde, dejó su vehículo fuera de la escuela y ya dentro “disparó y mató de manera horrible e incomprensiblemente a 14 estudiantes y a un profesor”, en un primer recuento de víctimas, aunque más tarde, la cifra ascendió a niños 19 muertos.
Se trata del tiroteo más letal en EE.UU. en lo que va de 2022 y ocurrió diez días después de que diez personas fallecieran por disparos en un supermercado en Búfalo, Nueva York en un ataque con motivaciones racistas.
Además, el de este martes es el segundo tiroteo en un centro escolar más mortífero de la última década, después del ocurrido en 2012 en la escuela de Sandy Hook en Newton, Connecticut, donde 26 personas murieron.
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