El presidente López Obrador envió reformas al Congreso para desaparecer 18 órganos públicos, porque, según dijo, “no dan resultados”
Este martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador envió reformas al Congreso para desaparecer 18 órganos, unidades administrativas y fideicomisos para reorganizar la administración pública porque argumenta que reciben presupuesto “sin propósito o resultados”.
“Se propone la fusión, integración o extinción de 18 órganos desconcentrados, organismos descentralizados, fideicomisos o unidades administrativas y la transferencia de sus funciones hacia secretarías de Estado”, se lee en la iniciativa firmada por el presidente.
En su exposición de motivos, señaló que, derivado de un análisis institucional realizado en diciembre de 2018, se observó un aparato gubernamental “plagado de instituciones redundantes, con duplicidad de funciones y de oficinas y partidas presupuestales sin propósito o resultados”.
Asimismo, sostuvo que la burocracia desmedida, con la creación de diversas entidades descentralizadas y desconcentradas del aparato público, ha generado “obesidad del Estado” con altos costos presupuestales.
La propuesta en materia de “simplificación orgánica”, defiende que las funciones de los órganos, unidades y fideicomisos que se pretenden eliminar o fusionar se encuentran duplicadas o segmentadas de manera innecesaria en varias instancias gubernamentales.
En este sentido, propone eliminar a la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional Anticorrupción y el Fideicomiso de Fomento Minero.
En tanto, se propone que la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) absorba los Servicios Nacional de Inspección y Certificación de Semillas y de Información Agroalimentaria y Pesquera, e impulsa que la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, también adjunto a la Sader, integre al Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura.
Asimismo, promueve que la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección integral de Niñas, Niños y Adolescentes se incorpore al Sistema Nacional de Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y la Coordinación General de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) se integre a la Secretaría de Gobernación.
Para el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, se propone que se le unan la Dirección General de Educación Indígena, Intercultural y Bilingüe, así como el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas.
Para los Institutos Nacional de la Economía Social y Nacional de las Personas Adultas Mayores se propone que se integren a la Secretaría del Bienestar, así como el Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad.
La Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía se trasladaría a la Secretaría de Energía y el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático hacia la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Mientras que esta última también recibiría, a través de su órgano desconcentrado Comisión Nacional del Agua, al Instituto Mexicano de Tecnología del Agua.
También esboza que el Fondo de Cultura Económica integre la Dirección General de Publicaciones, que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social haga lo mismo con el Instituto Mexicano para la Juventud.
Por último, de aprobarse esta propuesta legislativa del presidente López Obrador, se enviaría al Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia, a la Secretaría de Salud, que junto con la Dirección General de Políticas en Salud Pública crearían un nuevo Centro Nacional de Enfermedades Crónicas no Transmitibles.