Arturo Zaldívar, exministro de la SCJN negó, en entrevista para Radio Fórmula, que hablara a jueces para instruirlos o sugerirles que fallaran de cierta forma en un caso, como aseveró el presidente López Obrador
Afirmó que, mientras encabezó al máximo tribunal del país, siempre defendió al Poder Judicial y que considera que a lo que se refirió el presidente, en la conferencia de prensa matutina del pasado miércoles 21 de febrero, es a la cero tolerancia a la corrupción y que esta vigilancia ha desaparecido actualmente.
Zaldívar añadió que le parece que el tema gira más a un problema en el lenguaje que utilizó el presidente.
“Yo defendí la autonomía y la independencia de los jueces durante los cuatro años que fui presidente, nunca le hablé ni le he hablado a ningún juez, a ningún magistrado para sugerirle, para insinuarle, mucho menos para instruirle que fallara un asunto en un sentido o en otro.
“En mi administración hubo cero tolerancia a la corrupción. Entonces, me parece que lo que el presidente está percibiendo es que estos controles, esta vigilancia, ha desaparecido y ahora él percibe esta situación”, aseguró.
Diálogo
Zaldívar además afirmó que el diálogo entre poderes no sólo es positivo, sino necesario y que, ante la operación del crimen organizado, es importante que este ocurra.
“Durante todas las presidencias de la Corte, anteriores a la mía, exceptuando la actual, siempre hubo un diálogo respetuoso y una coordinación entre poderes, como hay en cualquier democracia”, dijo.
Y, añadió, que lo que se logró durante su presidencia, con una relación de diálogo y cordialidad con el Ejecutivo federal, fue el tema de seguridad a jueces y magistrados, el presupuesto y la reforma judicial de 2021.
Cabe mencionar que tras su renuncia a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Zaldívar se sumó al equipo de Claudia Sheinbaum, candidata a la Presidencia de la República por Morena, el Partido Verde Ecologista de México y el Partido del Trabajo.
Su renuncia fue duramente criticada por senadores de oposición, ya que acusaron que la Constitución indica que la única razón por la que un ministro puede renunciar a su encargo es por causas graves y esto no incluye aspiraciones políticas personales.