La candidata presidencial Xóchitl Gálvez defendió a agricultores mexicanos que en 2020 incumplieron con el tratado de aguas con EUA; el tratado bilateral tiene 80 años de antigüedad
La candidata presidencial Xóchitl Gálvez defendió este jueves a los agricultores de Chihuahua, que en 2020 rechazaron cumplir con la entrega de agua a Estados Unidos como parte de un tratado bilateral de 80 años de antigüedad.
“Cierto que se deben cumplir los acuerdos internacionales, pero eso no se hace quitando el agua a un estado para dárselo a otros, solo por intereses políticos y partidistas. Ya basta. El agua de Chihuahua se queda en Chihuahua”, declaró en un video Gálvez, quien está de gira en Tamaulipas, entidad fronteriza del noreste del país.
La aspirante recordó la polémica que ocurrió en 2020, cuando campesinos bloquearon caminos y trenes por dos meses para impedir el trasvase de agua de la presa La Boquilla como parte del Tratado de Aguas de 1944 entre Estados Unidos y México, que debe entregar cada quinquenio cerca de 2 mil 160 millones de metros cúbicos a su vecino.
El Gobierno de México estaba en riesgo de incumplir por la negativa de Chihuahua, que concentra un 54.1 por ciento del líquido que México debe entregar, por lo que el presidente de la República decidió que Tamaulipas entregaría el agua correspondiente, lo que desató indignación de campesinos de ese estado.
Xóchitl Gálvez, de la coalición Fuerza y Corazón por México, reconoció a los pobladores chihuahuenses por organizarse para evitar la entrega del agua.
“A pesar de ser reprimidos, no se achicaron. Al contrario, defendieron sin miedo su derecho al agua. La falta de lluvia y la sequía los ha golpeado de una manera brutal”, argumentó.
Sus declaraciones ocurren a un año de que México deba cumplir con el acuerdo con Estados Unidos, que a su vez debe entregar 9 mil 250 millones de metros cúbicos.
El agua ha jugado un rol central en las campañas ante la elección presidencial del 2 de junio, pues más de dos tercios del territorio mexicano, el 67.97 por ciento afrontan una sequía de “moderada a severa”, según el último reporte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
La opositora reconoció que “el reto” de su posible gobierno “para todo México será administrar el agua de una manera más eficiente”, para lo que prometió invertir en infraestructura hídrica, “tecnificar” el campo, tratar las aguas residuales y “castigar a quienes se la roban”.
México celebrará las elecciones más grandes de su historia el 2 de junio, en las que se jugarán más de 20 mil 700 cargos federales, incluyendo la presidencia, los 500 diputados, los 128 senadores y nueve gobiernos estatales.