Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México, rechazó las acusaciones de dictadura tras lograr supermayoría en el Congreso, permitiendo reformas constitucionales sin oposición
La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, negó este jueves que el país esté camino a una dictadura tras la obtención de la “supermayoría” en el Congreso, lo que permitirá modificar la Constitución sin necesidad de la oposición y avanzar con la reforma para elegir por voto popular al Poder Judicial.
“Es falso que venga una dictadura. ¿Quién ha luchado por la democracia siempre? Nosotros. Nosotros luchamos en contra de los fraudes electorales, nosotros luchamos por que México sea un país democrático”, declaró Sheinbaum a la prensa frente a su casa de transición.
Estas declaraciones ocurren luego de que el Tribunal Electoral avalara el acuerdo del Instituto Nacional Electoral (INE) sobre la asignación de diputados federales de representación proporcional. Con esto, la alianza oficialista supera los dos tercios del Congreso, suficientes para impulsar reformas constitucionales.
El Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados lograron 364 de los 500 diputados, y 83 de los 128 senadores, consolidando una amplia mayoría que les permitirá impulsar, a partir del 1 de septiembre, las reformas propuestas por el actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, incluida la elección popular del Poder Judicial.
La reforma judicial ha generado preocupación en la oposición, organismos internacionales como la ONU, e incluso en los gobiernos de Estados Unidos y Canadá, debido a posibles riesgos para la división de poderes y la estabilidad financiera. Sin embargo, Sheinbaum insistió en que la reforma refleja “una voluntad del pueblo de México”.
Ante la movilización de estudiantes de Derecho de la UNAM en contra de la reforma, Sheinbaum recomendó “leer bien la propuesta” y aseguró que no habrá más protestas una vez que la votación comience la próxima semana. “Lo que están decidiendo nuestros legisladores es lo que quiere el pueblo”, subrayó.