Si una de tus bebidas favoritas es el café, ya sea para despertar o porque simplemente te gusta, te dejamos una serie de consejos para que lo disfrutes en el mejor momento de tu día
En un artículo publicado en la revista digital Food & Wine en Español, expertos en la materia explicaron que por la composición del café, este otorga al cuerpo diferentes beneficios que dependerán del tipo de producto y de las cantidades en las que este sea consumido.
Al respecto, cita el texto, la Federación de Cafeteros señaló que algunos experimentos indican que la cafeína en el café puede mejorar la actividad mental, “principalmente por el incremento de la velocidad del cerebro para el procesamiento de datos y también porque equilibra nuestra capacidad de variabilidad”.
Sobre los beneficios, el artículo destaca el aumento de energía, disminución del cansancio y la somnolencia, reduce el riesgo de sufrir Parkinson y Alzheimer, es diurético y previene la formación de cálculos renales.
En cuanto a las cantidades, la revista digital cita a la doctora Guadalupe Teresa Arujo en su artículo “Café: cualidades y efectos adversos”, recomienda de tres a cuatro tazas de café de grano al día, o cinco si se trata de café instantáneo; no al despertar, pero si por las mañanas, unas horas después de haber consumido agua simple.
Y explica “no es recomendable ingerirlo inmediatamente al despertar, pues nuestros niveles de cortisol son muy elevados, por lo que si te gusta disfrutarlo en las mañanas, lo mejor es optar por un vaso de agua y beber café al menos dos o tres horas después. Es preferible que tampoco desayunes sólo una taza de café porque la bebida puede irritar tu estómago”.
Asimismo, el texto señala que otro momento para tomar café es después de la comida, pues “es frecuente que fisiológicamente nos sintamos cansados o relajados después de comer debido al sueño postprandial (mejor conocido como mal del puerco)”.
Según Mónica Méndez Díaz, académica del Departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina de la UNAM, “encontramos en el café la forma de combatirlo y mantenernos despiertos. Eso o una caminata de 15 minutos hacen que mantengamos el sistema de vigilia”.
La importancia de planear las horas del día en las que se consume cafeína, radica en que, de lo contrario, se puede desarrollar una tolerancia a ella. De la misma manera en la que se deben usar los antibióticos y analgésicos únicamente cuando son necesarios, es importante beber café únicamente cuando el cuerpo necesita incrementar su estado de alerta.