Un ‘recall’ es un llamado de atención que realiza un fabricante de automóviles a los propietarios de vehículos de un determinado modelo que ha salido de fábrica con una falla específica que afecta su rendimiento o seguridad
Esta acción busca que los clientes lleven sus autos a los talleres para una revisión preventiva gratuita.
Los ‘recalls’ pueden ser originados por diferentes motivos, como problemas en el diseño, el ensamblaje, la cadena de suministro o el desgaste de alguna pieza del vehículo. Algunas fallas pueden ser más graves que otras y afectar la seguridad de los ocupantes o de terceros. Un ejemplo famoso de ‘recall’ fue el caso de Takata, proveedor de infladores de bolsas de aire para varias marcas, que presentó un mal funcionamiento ocasionando lesiones o problemas mayores en los ocupantes.
Si recibes una notificación de que tu automóvil ha sido llamado a un ‘recall’ por el fabricante, lo primero que debes hacer es no ignorarla. Se trata de una medida preventiva que busca evitar posibles accidentes o daños mayores en tu vehículo. Lo siguiente es contactar al concesionario o taller autorizado más cercano para programar una cita y llevar tu automóvil para su revisión. Ellos se encargarán de verificar la falla y repararla o reemplazar la pieza defectuosa sin costo alguno para ti.
Es importante que no demores en llevar tu automóvil al ‘recall’, ya que circular con una falla técnica puede ser peligroso. Además, si tienes planes de vender tu vehículo, debes tener en cuenta que el historial de ‘recalls’ puede afectar su valoración y atraer o alejar a posibles compradores. Por ello, se recomienda consultar el historial del automóvil antes de comprarlo o venderlo, para saber si ha tenido algún ‘recall’ y si ha sido atendido correctamente.
Los ‘recalls’ son una forma de garantizar la calidad y seguridad de los vehículos que circulan en las calles. No se trata de una mala imagen para las marcas, sino de una responsabilidad y compromiso con sus clientes. Si tu automóvil ha sido llamado a un ‘recall’, no lo veas como una molestia, sino como una oportunidad para cuidar tu inversión y tu bienestar.