El quarterback de Cincinnati estará fuera al menos tres meses tras lesionarse el pie derecho; su ausencia pone en riesgo el buen arranque de los Bengals en la temporada NFL 2025
Los Cincinnati Bengals recibieron un golpe devastador: Joe Burrow, su quarterback titular y rostro de la franquicia, será operado del dedo gordo del pie derecho y estará fuera de acción por al menos tres meses. La lesión, sufrida el domingo ante Jacksonville Jaguars, podría extender su ausencia hasta diciembre, complicando los planes de un equipo que inició la temporada con marca de 2-0.
Burrow, de 28 años, ha sido clave en el renacer de los Bengals desde su llegada en 2020. En apenas cuatro campañas llevó al equipo a un Super Bowl, acumuló más de 15 mil yardas aéreas y firmó una extensión de contrato por 275 millones de dólares en 2023. Su baja deja al entrenador Zac Taylor ante el reto más grande desde que tomó las riendas de la franquicia.
El informe médico reveló que Burrow padece “turf toe”, una lesión de tendón común en jugadores que enfrentan superficies artificiales. Aunque el mariscal ya había pasado por quirófano por una lesión en la muñeca en 2023, esta dolencia llega a un pie que no había presentado problemas previos. La cirugía se realizará en las próximas 48 horas en Cincinnati.
El peso ofensivo recaerá ahora en Jake Browning, suplente que demostró temple en 2023 al ganar cuatro de siete partidos como titular, pero cuya inconsistencia quedó expuesta con tres intercepciones en el triunfo ante Jaguars. Analistas proyectan que la ausencia de “Joe Cool” podría costarle a Cincinnati hasta tres victorias en temporada regular.
La afición expresó preocupación en redes, recordando cómo las lesiones han frenado el ascenso de Burrow, considerado uno de los quarterbacks más talentosos de la NFL. Mientras tanto, la directiva apuesta por reforzar la línea ofensiva y potenciar el juego terrestre liderado por Chase Brown.
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