La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) cerró formalmente, pese al temor de que su desaparición pueda conllevar la muerte de millones de personas; esto, luego del recorte de 85% a sus proyectos
Este martes, por orden de la administración de Donald Trump, la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) cerró formalmente, pese al temor de que su desaparición pueda conllevar la muerte de millones de personas.
La USAID se fundó en 1961, ideado por el presidente John F. Kennedy, con el objetivo de usar la ayuda para atraer al mundo en desarrollo el campo democrático occidental.
Sin embargo, el secretario de Estado, Marco Rubio, recortó el 85 por ciento de sus proyectos y la incorporó al Departamento de Estado.
Los expresidentes George W. Bush y Barack Obama, así como el vocalista de la agrupación U2, Bono, elogiaron el trabajo de la agencia, que consideran necesario; esto, en una despedida al personal restante el lunes.
Bush destacó los logros de PEPFRA en la lucha contra el SIDA: "¿Beneficia a nuestra nación que 25 millones de personas que habrían muerto ahora vivan? Creo que sí".
Por su parte, Obama consideró "inexplicable" poner fin al USAID y advirtió que "pasará a la historia como un error colosal".
En tanto, Rubio esbozó un panorama distinto del USAID, el cual fue uno de los primeros blancos de los recortes gubernamentales liderados por Elon Musk. El secretario argumentó que "es un modelo basado en la caridad" que está desactualizado.
En un ensayo, Marco Rubio escribió: "Más allá de crear un complejo industrial de oenegés de alcance mundial a expensas de los contribuyentes, el USAID tiene poco que mostrar desde el final de la Guerra Fría" y también se quejó de que muchos países receptores de la ayuda estadounidense no voten con EUA en la ONU, porque a veces se alinean con China.
Un funcionario anónimo del Departamento de Estado afirmó que el estudio The Lancet se basa "suposiciones incorrectas" y que Estados Unidos continuará con la ayuda, pero con de una forma "más eficaz"; además, aseveró que el PEPFAR se mantendrá y se centrará en detener la transmisión del VIH de madre a hijo, pero reconoció que EUA ya no financia la medicación de la PrEP, que reduce significativamente la tasa de transmisión del VIH.
Entre los programas del grupo financiados por el USAID, Bob Kitchen, vicepresidente de emergencias del Comité Internacional de Rescate, explicó que casi 400 mil refugiados que huyeron de la guerra en Sudán se han visto privados de ayuda urgente y que más de 500 mil afganos, en su mayoría mujeres y niñas, han quedado sin acceso a la educación y atención médica.
Agregó que los recortes agravarán la migración, ya que dijo, "si la inseguridad se extiende, los brotes se propagan, ya no hay línea de defensa".
Con información de: El Economista
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