
Esto implica que poco más de 80 millones de personas en el país tienen dificultad para acceder a uno o más derechos sociales; en México, la carencia social más común fue el acceso a la seguridad social
Según la Medición de Pobreza Multidimensional, difundida por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), al corte de 2024 se observó que seis de cada 10 mexicanos presentan al menos una carencia social, que equivale al 61.7 por ciento de la población.
Cabe señalar que la pobreza multidimensional en México ha logrado reducirse en los últimos ocho años, sin embargo, pese a los avances, las carencias sociales siguen siendo un reto para el desarrollo económico del país.
En términos absolutos esto implica que poco más de 80 millones de personas en el país tienen dificultad para acceder a uno o más derechos sociales. Entre los derechos que se contemplan en la medición están la alimentación, educación continua, seguridad social, vivienda decorosa, servicios públicos e instituciones de salud.
La titular de la unidad especializada para la Medición de Pobreza en el Inegi, Claudia Vanessa Maldonado Trujillo, destacó que "una carencia social indica que las personas no tienen garantizados los mínimos sociales para acceder a un derecho por la Constitución". Dijo que el acceso a los derechos sociales es uno de los dos umbrales fundamentales para la medición de pobreza, aunado a los ingresos corrientes de las personas.
En el país, la carencia social más común fue el acceso a la seguridad social, ya que casi la mitad de la población no está afiliada a una institución de seguridad social como el IMSS o ISSSTE; le sigue la carencia por acceso a instituciones de salud, debido a que el 34.2 por ciento de la población no se encuentra afiliada a ninguna institución de salud pública y tampoco cuenta con seguro de gastos médicos para atenderse en instituciones privadas.
En tercer lugar se encuentra la carencia por rezago educativo, donde el 18.6 por ciento de la población la presenta, es decir, no cuentan con el nivel de estudios correspondiente a su edad. En cuarto sitio está la carencia por acceso efectivo a una alimentación nutritiva y de calidad, ya que 14.4 por ciento de las personas, es decir, una de cada 10 no puede comer cumpliendo los estándares de nutrientes necesarios para la vida; lo preocupante es que es particularmente alta en niños, niñas y adolescentes, así como en comunidades indígenas.
Finalmente, la carencia por espacios dignos y calidad de vida en la vivienda, se presenta en 7 por ciento de la población. Aunque las carencias sociales no son el único indicador de pobreza, potencian la vulnerabilidad en el desarrollo de las personas.
Con información de: El Economista
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