El miércoles 10 de diciembre, a las 10:00 horas, realizarán una manifestación simultánea en la SCJN y en el Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa
Mónica Huerta Muñoz, abogada y defensora de Athos y Tango, los perros rescatistas que perdieron la vida en junio del 2021 por envenenamiento, señaló que, al emitir una reducción de la sentencia para el responsable de la muerte de los canes, el Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa del Vigésimo Segundo Circuito del Poder Judicial de la Federación con sede en Querétaro, desvaloriza los derechos de los animales y busca dejar “en letra muerta” la norma vigente.
Explicó que el sentenciado promovió a través de su defensa un amparo directo y, en consecuencia, el tribunal colegiado resolvió que la pena de 10 años seis meses debe ser reducida a cuatro años, con posibilidad de conmutar por 10 mil pesos al considerar que existe un doble enjuiciamiento porque se le imputa el delito de crueldad y, como agravante, métodos crueles.
La abogada puntualizó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) falló a favor de los perritos y ordenó al tribunal colegiado emitir una nueva sentencia en la que señaló que no existe un doble enjuiciamiento.
Narró que el tribunal colegiado tardó un año en dar cumplimiento a la sentencia con “el pretexto de la reforma judicial” y, el 30 de octubre, sesionó y otorgó un amparo a favor del sentenciado. No obstante, aclaró que, el 2 de diciembre, presentaron un recurso de revisión contra la nueva resolución y solicitaron que la corte atraiga una vez más el caso.
“Hablamos de la desvalorización que hacen por la vida de un animal y que no quieren aplicar la norma. Es un retroceso y una trasgresión a los derechos de los animales, los cuales han aumentado desde que sucedió la sentencia de Athos y Tango”, subrayó.
Informó que el miércoles 10 de diciembre, a las 10:00 horas, realizarán una manifestación simultánea en la sede de la SCJN de la Ciudad de México y en la sede del Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa que se encuentra en la avenida Fray Luis de León, de la ciudad de Querétaro.
Amparo
La abogada explicó que el sentenciado promovió un amparo directo y, en consecuencia, el tribunal colegiado resolvió que la pena de 10 años seis meses debe ser reducida a cuatro años, con posibilidad de conmutar por 10 mil pesos al considerar que existe un doble enjuiciamiento.
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