Fulham perdió 0-1 ante Arsenal en la Premier League. Raúl Jiménez jugó todo el partido, pero su esfuerzo no bastó para evitar una derrota marcada por el balón parado y la falta de acierto
Raúl Jiménez jugó los 90 minutos en una noche amarga para el Fulham. El delantero mexicano peleó cada balón, bajó a defender, se ofreció como descarga y ganó tres de sus tres entradas, pero no pudo evitar la derrota por la mínima (0-1) ante el Arsenal, líder de la Premier League. En Montjuïc no hubo épica: solo frustración y un guion conocido para los ‘Cottagers’.
El gol que decidió el partido llegó desde la fórmula más efectiva de los de Mikel Arteta: el balón parado. Leandro Trossard apareció libre en el segundo palo para empujar la pelota tras un desvío de Gabriel. Fue suficiente para mantener al Arsenal en la cima del campeonato y dejar al Fulham atrapado en la mitad baja de la tabla, con apenas ocho puntos en ocho jornadas.
Antes de ese golpe, los londinenses del norte ya habían avisado. El árbitro anuló un tanto a Riccardo Calafiori por fuera de juego, y el Fulham resistía como podía. En la primera mitad, Marco Silva apostó por el orden y el contragolpe, confiando en la conexión entre Alex Iwobi y Jiménez para sorprender a David Raya. Hubo aproximaciones, pero faltó la precisión que define los partidos grandes.
El mexicano cerró el encuentro con 30 toques de balón, un 44 por ciento de acierto en el pase y cuatro duelos ganados en el suelo. Su trabajo fue más de desgaste que de lucimiento: retener la pelota, estorbar a los centrales, abrir espacios para compañeros que nunca llegaron. En el gol de Trossard, incluso fue testigo involuntario: su marca, perdida en el segundo palo, acabó viendo la pelota besar la red.
El partido no estuvo exento de polémica. Anthony Taylor señaló un penalti sobre Bukayo Saka que el VAR revocó al comprobar que el defensor Kevin había tocado el balón antes del contacto. Más tarde, la tecnología volvió a intervenir para revisar un posible agarrón sobre Viktor Gyökeres, aunque no concedió la pena máxima.
Para el Arsenal, el triunfo reafirma una idea: la eficacia por encima del brillo. Los ‘Gunners’ vuelven al liderato con tres puntos de ventaja sobre el Manchester City y cuatro sobre el Liverpool, que aún debe enfrentar al Manchester United. Arteta suma además una nueva portería imbatida para David Raya, que ya lidera junto a Nick Pope la clasificación del Guante de Oro con cinco encuentros sin recibir gol.
Para el Fulham, el panorama es más terrenal. El equipo se mantiene en el puesto 14, tres puntos por encima del descenso, mientras intenta recuperar sensaciones y gol. Jiménez, titular indiscutible pese a las estadísticas discretas, encarna el esfuerzo de un equipo que resiste más por convicción que por futbol.
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