El objetivo es prevenir riesgos asociados con la exposición prolongada en una postura vertical; los asientos con respaldo deberán estar en un espacio que la empresa destine para este fin
Este 17 de junio, entró en vigor la Ley Silla, luego de 180 días de su promulgación; una reforma a la Ley de Federal del Trabajo (LFT) que reconoce el derecho al decanso durante la jornada laboral, obligando a los empleadores a ofrecer asientos con respaldo a sus trabajadores para tomar una pausa.
Con la Ley Silla, ahora la LFT prohíbe a las empresas obligar a sus empleados permanecer de pie en la totalidad de su jornada laboral; el objetivo es prevenir riesgos asociados con la exposición prolongada en una postura vertical.
Esta ley tiene una conexión con el descanso en el trabajo, junto con la reforma de vaciones o el derecho a la desconexión digital que establece la reforma de teletrabajo. Cabe señalar que son las últimas modificaciones a la legislación laboral enfocadas en la materia.
Los asientos con respaldo deberán estar en un espacio que la empresa destine para este fin, por lo que no hay una obligación de colocar las sillas en un lugar donde se desarrollan las actividades. Además, la Ley Silla está dirigida principalmente a centros de trabajo del sector de servicios, comercio y análogos. En el caso de empresas del giro industrial, la disposición solo se aplicará si la naturaleza de las actividades lo permita.
La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), a partir del 17 de junio tiene un plazo de 30 días naturales para emitir la normatividad sobre los factores de riesgo de trabajo asociados con la exposición extensa en postura vertical.
A partir de la entrada en vigor correrá un plazo de 180 días naturales para que las empresas adecúen su normativa interna para cumplir con la nueva obligación y la fecha límite para esto será el 14 de diciembre de 2025.
Aunque la reforma laboral reconoce el derecho al descanso, el uso de las sillas y el tiempo destinado para las pausas será regulado por los reglamentos internos de trabajo.
Es de destacar que, la postura vertical sin descanso se asocia con la fatiga, tendinitis, várices, lesiones en las rodillas, dolores musculares, fascitis plantar y lumbalgia, entre otros padecimientos.
Con información de: El Economista
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