Este año, la Navidad vendrá cargada de la mezcla de colores clásicos con atrevidos; la tendencia de lo artesanal ganará terreno y el maximalismo estará en esplendor
La Navidad cada vez está más cerca y no solo es una fecha más en el calendario, es casi un estado de ánimo que invita a transformar espacios para llenarlos de magia, color y alegría.
Por eso es que el árbol, las luces, los colores, la corona de Adviento, los angelitos, Santa Claus, los cascanueces y demás accesorios sirven de inspiración para crear un ambiente festivo, único y cálido.
Este año, las tendencias apuntan a una Navidad más diversa, más atrevida y personal, donde los colores tradicionales conviven en armonía con gamas insólitas, así como estilos que se reinventan para generar espacios sorprendentes.
Las tonalidades clásicas no pasarán de moda, como el rojo y el blanco, pero también se mezclarán con el rosa fucsia para renovar la tradición. Otra combinación atrevida es la mezcla con el azul noche para darle un toque de misterio, pero el tono oliva también figurará por su conexión con la naturaleza.
Además, los aromas jugarán un papel importante para transportarnos al escenario navideño con velas de la temporada, mientras que texturas suaves como el terciopelo serán protagonistas y el sonido de villancicos darán un plus.
El maximalismo festivo se impone con árboles rebosantes de adornos, esferas y figuras ‘vintage’, ramas, hojas secas, piñas, fibras vegetales y centros de mesa creativos de manera sostenible encajarán en todo tipo de interiores.
La tendencia artesanal ganará peso este año y artículos personalizados consolidarán los espacios e, incluso, para los regalos.
Sin embargo, lo más primordial es contar una historia propia a través de colores, objetos y detalles que conecten con vivencias personales y que puedan ser compartidas… porque la magia no tiene manual y esto solo son sugerencias. ¿Ya pensaste cómo vas a decorar tu casa, departamento u oficina?
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