Porfirio Muñoz Ledo, quien fue fundador del PRD, dirigente tanto del PRI como de la oposición, candidato presidencial y una de las principales figuras de la izquierda mexicana, falleció a los 89 años
A los 89 años de edad, el político y diplomático mexicano Porfirio Muñoz Ledo murió –este domingo 9 de julio– por la madrugada luego de haber permanecido hospitalizado durante una semana; y poco después de haber sido dado de alta.
Su fallecimiento fue confirmado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), del que fue fundador en 1989 tras haber abandonado las filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en el cual forjó una amplia carrera política desde la década de 1960.
“La Dirección Nacional Ejecutiva del PRD lamenta el fallecimiento de Porfirio Muñoz Ledo, fundador de este instituto político, politólogo y diplomático de izquierda. Extendemos nuestras condolencias a sus familiares y amigos”, publicó el partido del Sol Azteca en redes sociales.
La Dirección Nacional Ejecutiva del #PRD lamenta el fallecimiento de @PMunozLedo, fundador de este instituto político, politólogo y diplomático de izquierda. Extendemos nuestras condolencias a sus familiares y amigos. #QEPD pic.twitter.com/dR0vGckkAG
— PRD (@PRDMexico) July 9, 2023
Dentro de las filas del tricolor ocupó cargos relevantes como secretario del Trabajo y Previsión Social, en el sexenio del expresidente Luis Echeverría Álvarez; y secretario de Educación Pública, durante el gobierno del expresidente José López Portillo.
A mediados de la década de 1970, fue líder nacional del PRI; sin embargo, posteriormente, fue de los principales críticos del corporativismo y del presidencialismo priista; junto a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano e Ifigenia Martínez, creó la Corriente Democrática que terminó por abandonar las filas del entonces partido oficial.
En las elecciones presidenciales de 1988, apoyó la candidatura de Cárdenas Solórzano por parte del Frente Democrático Nacional; pese al fraude electoral cometido por el oficialismo priista a favor de Carlos Salinas de Gortari, Porfirio Muñoz Ledo logró ganar un escaño en el Senado de la República del Congreso de la Unión.
Durante el último informe de gobierno del expresidente Miguel de la Madrid Hurtado, pasó a la historia política del país por haber interpelado e interrumpido varias veces el discurso del entonces mandatario mexicano.
Un año después, fue uno de los miembros fundadores del PRD (que durante décadas fue la principal fuerza política de izquierda a nivel nacional). En 1991, fue candidato perredista a la gubernatura del estado de Guanajuato; y respaldó al abanderado del Partido Acción Nacional (PAN), Vicente Fox Quesada, ante el fraude electoral orquestado por el PRI.
A raíz de la derrota priista en las elecciones intermedias de 1997, fue elegido como el primer presidente de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión surgido de la oposición; por esta razón, respondió un informe de gobierno del expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León.
Salida del PRD
En 1999, renunció al PRD por desacuerdos con Cuauhtémoc Cárdenas; un año más tarde, fue candidato presidencial del desaparecido Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM).
Luego del histórico triunfo electoral del candidato panista Vicente Fox en los comicios presidenciales de 2000, Porfirio Muñoz Ledo fue nombrado embajador de México ante la Unión Europea (UE).
De regreso en México, apoyó las aspiraciones políticas del entonces jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador. Luego fue diputado federal del Partido del Trabajo (PT) y responsable de impulsar la reforma política de la capital del país, la cual se convirtió en Ciudad de México.
Como consecuencia de la histórica victoria de López Obrador en las elecciones presidenciales de 2018, Porfirio Muñoz Ledo fue elegido nuevamente como presidente de la Cámara de Diputados y fue el encargado de colocarle la banda presidencial al político tabasqueño el 1 de diciembre de aquel año.
No obstante, su relación con López Obrador y el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) se deterioró durante los últimos años, luego de que perdiera la dirigencia nacional de dicho partido político a manos de Mario Delgado Carrillo. En la última parte de su vida, manifestó duras críticas a la denominada Cuarta Transformación.